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11 Jun Los pujos: qué son y cómo prepararte para pujar durante el parto

Los pujos son los esfuerzos que realiza la mamá durante la fase expulsiva del parto para permitir que su bebé descienda por el canal del parto. Durante los pujos, la embarazada empuja con su musculatura abdominal y pélvica, haciendo fuerza para ayudar al bebé a nacer.

Los pujos se producen en la segunda fase del parto: la fase expulsiva. En la primera fase, la fase de dilatación, el cuello del útero se habrá dilatado hasta aproximadamente los 10 centímetros, y habremos sentido las contracciones, cada vez más intensas y frecuentes, que habrán facilitado este proceso.

Durante la fase expulsiva, las contracciones se acompañan de los pujos y ambas fuerzas se combinan para dar a luz al bebé.

 

Pujos espontáneos y pujos dirigidos

Por norma general, se suele distinguir entre dos tipos de pujos:

  • Los pujos espontáneos: son los esfuerzos que realiza la mamá sin ningún tipo de indicación médica. De forma natural, cuando la mujer entra en la fase expulsiva del parto, siente la necesidad de pujar. En el caso de los pujos espontáneos, la mamá empujará de la forma que ella sienta necesaria, según su cuerpo se lo indique. También se detendrá cuando ella lo sienta conveniente.
  • Los pujos dirigidos: son aquellos en que la mamá empuja siguiendo las indicaciones del personal médico que la asiste en el parto. Los profesionales estarán monitorizando las contracciones para poder indicar a la mamá cuándo y cómo pujar.

 

Ambos tipos de pujos tienen sus ventajas e inconvenientes:

  • En el caso de los pujos espontáneos, se defiende que son más efectivos, ya que se realizan de forma natural en coordinación con las contracciones. Los estudios muestran que reducen las probabilidades de parto instrumental y disminuye el riesgo de traumatismos perineales, beneficiando el suelo pélvico.
  • En los pujos dirigidos, el principal beneficio es que suelen ser necesarios cuando a la mujer se le administra la analgesia/anestesia epidural. Además, los estudios demuestran que los pujos dirigidos reducen en algunos minutos la duración del parto.

 

Sean naturales o dirigidos, los pujos requieren el trabajo y el esfuerzo de la madre, que empleará su musculatura para realizar esta importante tarea.

 

 

¿Cómo prepararnos para pujar durante el parto?

El día del parto será sin duda uno de los momentos más importantes de tu vida. Y, lógicamente, también lo será para tu hijo. Es una buena idea prepararnos bien para este momento tanto a nivel físico como psicológico.

 

La preparación psicológica

Cuando se acercan a la fecha señalada, muchas mujeres sufren miedos e inseguridades sobre cómo será su parto. Es muy buena idea leer, informarnos y educarnos bien. Conocer las fases del parto, saber cuáles son las sensaciones que sentiremos, los tiempos que suele llevar cada etapa… Asistir a clases de preparación al parto nos permitirá además resolver nuestras dudas con un profesional especializado y evitar dejarnos llevar por varios mitos populares que podemos escuchar.

Estar bien familiarizada con este proceso puede ayudar a la madre a sentirse más tranquila durante el parto y a minimizar los miedos que pueda tener al respecto.

Sin embargo, no hay ningún sustituto para la práctica. El deporte para embarazadas, asistir a clases de dilatación y pujos para practicar nos puede proporcionar una primera experiencia con el trabajo físico del parto, algo que también nos puede aportar más seguridad, además de contribuir a la preparación física.

 

preparación al parto

 

La preparación física

No hay que olvidar que el parto es un proceso físico. Los pujos que la mujer debe realizar durante el parto requieren un gran esfuerzo de la musculatura (y lo normal es que acabes agotada). Llegar a este momento cumbre del embarazo en buena forma física y tener control y conocimiento de nuestros músculos y nuestro cuerpo nos puede facilitar este proceso.

Realizar ejercicio suave, como por ejemplo el Pilates, natación o yoga es una recomendación general a lo largo del embarazo. El deporte tiene efectos positivos durante todo el embarazo (más energía, reducción del dolor de espalda, mayor facilidad para dormir…) y también puede ser un gran aliado para llegar al parto en buena forma física y con la musculatura preparada.

Además de preparar nuestro cuerpo de forma general, asistir a una clase de dilatación y pujos nos enseñará a conocer y trabajar los músculos que utilizaremos durante el parto. También nos proporcionará información sobre los dos tipos de pujos que podemos vivir, y nos preparará para ambos.

Por otro lado, existen técnicas de preparación para otros elementos del parto, como es el caso del masaje perineal, que facilitará el paso del bebé por el canal del parto.

 

Recuerda que tienes a disposición un gran número de recursos para ayudarte a sentirte preparada para el día del parto. Ante los miedos y preocupaciones, no olvides que estarás rodeada de personal médico que sabrán aportarte toda la seguridad que necesites.

Ana Rodriguez
arodriguez@atempocare.com

Fisioterapeuta gestora de AtempoCare, centro de fisioterapia especializado en el cuidado de la mujer, la maternidad y la atención infantil.

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